Nadie de nosotros, ni uno solo, ni la mínima parte. Ni el mínimo pensamiento...
Rabia arrancada del vagón número 23... sentidos aquebrantados muchas veces por raciocinio vulgar. Lucro con tu mente, te mientes al mirarte desde adentro y fluyes en un caudal de fundamentos mal paridos.
Recelo, dolor y hambre de puteadas grotescas, en fin...
Siempre es lo mismo... nada, no hay espacio para inhalar.
27 abril 2009
22 abril 2009
~Habla
Soy la voz que escucha aunque no quieras mirar...
Soy las noches en vela que pasaste indagando entre mis más suaves estrellas...
No estás, no sabes estar presente, pero déjame enseñarte a recordar con una gota de paciencia; previamente ensuciada con libido permanente...
Regurgita los antiguos versos que se escaparon de las sábanas de tus mañanas inciertas.
Habla, escupe sangre envuelta en venas, en vida; en sentir la fluidez del tiempo.
Soy las noches en vela que pasaste indagando entre mis más suaves estrellas...
No estás, no sabes estar presente, pero déjame enseñarte a recordar con una gota de paciencia; previamente ensuciada con libido permanente...
Regurgita los antiguos versos que se escaparon de las sábanas de tus mañanas inciertas.
Habla, escupe sangre envuelta en venas, en vida; en sentir la fluidez del tiempo.
17 abril 2009
~Suave
Etéreo, firme como los brazos de la mañana expulsando soles desde tus ojos, pero suavidad con la mirada. Balance entre cielo y tierra, como un espacio lleno de pureza y qué sé yo.
Un beso tuyo dice todo, sin palabras que permuten en mis sueños y entorpezcan el pecado que estamos a punto de cometer. Sigue tu rumbo entre mis dedos, llega a donde quieras hacerlo. Rápido o lento finalmente es lo mismo, pues llega al límite de lo anhelado; de lo deseado.
Huracán de arrebatos mal paridos, de noches sin sabor y mañanas perturbantes...
Suavidad, fuerza y sobretodo belleza.
Un beso tuyo dice todo, sin palabras que permuten en mis sueños y entorpezcan el pecado que estamos a punto de cometer. Sigue tu rumbo entre mis dedos, llega a donde quieras hacerlo. Rápido o lento finalmente es lo mismo, pues llega al límite de lo anhelado; de lo deseado.
Huracán de arrebatos mal paridos, de noches sin sabor y mañanas perturbantes...
Suavidad, fuerza y sobretodo belleza.
07 abril 2009
~Altar
Brazos caídos.
Lengua sucia.
Amor podrido.
Alma vacía.
Mirada perdida.
Manos rotas.
Ojos pesados.
Cielo cerrado.
Piso endeble.
Cama muerta.
Sábanas manchadas.
Eres un altar, sucio; alto; frío e indestructible como el aire. Succionas mis pensamientos como un embudo próximo a tu cascada, caigo en tus manos como un destello de oxígeno.
Mis conocidos episodios de vida han requerido nacer y volver a destellar para poder alcanzar la omnipotencia de un segundo; parpadeo lento de hojas mentirosas que se burlan de mis dedos.
Una muerte lenta y acechante que se asemeja al volar y al aleteo de una mosca; veinticuatro horas de falsedad; un día de ilusión; vida desamparada que no alcanza para mirarte de frente.
Detente, en un herido susurro, en un instante insano, en manchas de realidad que se ensucian en sus mismos charcos de presente mal enfocado.
Eres un altar... estás arriba, no te alcanzo, no te veo, no te conozco, sin embargo te siento arder en las fraguas de esas llamas que prenden los pensamientos...
Puede ser.
Lengua sucia.
Amor podrido.
Alma vacía.
Mirada perdida.
Manos rotas.
Ojos pesados.
Cielo cerrado.
Piso endeble.
Cama muerta.
Sábanas manchadas.
Eres un altar, sucio; alto; frío e indestructible como el aire. Succionas mis pensamientos como un embudo próximo a tu cascada, caigo en tus manos como un destello de oxígeno.
Mis conocidos episodios de vida han requerido nacer y volver a destellar para poder alcanzar la omnipotencia de un segundo; parpadeo lento de hojas mentirosas que se burlan de mis dedos.
Una muerte lenta y acechante que se asemeja al volar y al aleteo de una mosca; veinticuatro horas de falsedad; un día de ilusión; vida desamparada que no alcanza para mirarte de frente.
Detente, en un herido susurro, en un instante insano, en manchas de realidad que se ensucian en sus mismos charcos de presente mal enfocado.
Eres un altar... estás arriba, no te alcanzo, no te veo, no te conozco, sin embargo te siento arder en las fraguas de esas llamas que prenden los pensamientos...
Puede ser.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)